Autor: Jamie McGuire
N° de Páginas: 441
Editorial: SUMA
Intervalo de fechas en que se leyó: 7 - 19 de septiembre.
Reflexión: La relación entre Abby y Travis me pareció algo extraña, ya que la chica intentaba escapar de su pasado en Wichita, Kansas: de los vicios y su mala reputación. Mientras que Travis era todo lo mencionado: su vida se basaba en alcohol, apuestas y mala fama de chico malo.Pero lo que más me asombra es que, incluso al ser una contradicción del otro, se complementan magníficamente. Ya que, Travis conoce a Abby como la palma de su mano, es decir, puede identificar cuando se siente mal o incómoda y la reconforta en cada momento que es necesario. Mientras que Abby guía a Travis por el camino de la bondad y la solidaridad.
Otro aspecto que me parece importante es como ambos logran romper los estereotipos. Ella, la típica chica de primer año que es una santa y no sale de casa por las noches y él, el típico chico popular que trae consigo a media universidad enamorada de él, hecho del cual él se aprovecha y se divierte con eso. Pero todo cambia cuando se conocen: Travis deja de ir a fiestas, de tomar descontroladamente, incluso de pelear. Y Abby vuelve a ser ella, (a pesar de que al principio diga que lo odie, más adelante le agradece a Travis por hacer que la antigua ella volviera a aparecer.)
Valoración: MB
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